Practica esta lección: Ir al examen
Bloque II
73
1.
Repartan entre los equipos los
cuatro fragmentos del texto.
2.
En una hoja dibujen una imagen
que ilustre el fragmento de texto
que les asignaron.
3.
En otra hoja, dibujen una escena
de la vida cotidiana que se
parezca al fragmento del relato
que leyeron.
4.
Coloquen en el pizarrón los dibujos
de los equipos. Acomódenlos en la
secuencia de la leyenda.
5.
Expliquen qué significan los
dibujos que elaboraron.
6.
Discutan la siguiente pregunta.
Anoten en el pizarrón la respuesta
del grupo y cópienla en su
bitácora.
¿Cómo se relacionaban los
pueblos prehispánicos con la
naturaleza?
Consulta en la Biblioteca de Aula
el libro
Axolotl: el ajolote
,
de
José Antonio Flores Farfán. Léelo
con tu familia y descubre cómo
se relaciona con la leyenda que
conociste en esta clase.
Escena de
la vida
cotidiana
Cerca de la medianoche todos los dioses se reunieron en torno al
fogón. Colocaron a los elegidos delante del fuego y hablaron a uno de ellos:
—¡Ten valor, oh Tecuciztécatl, arrójate en el fuego!
Sin tardanza éste quiso echarse al fogón, pero cuando lo alcanzó
el ardor de las llamas tuvo miedo, retrocedió y se quedó parado. Una
vez más lo intentó pero no se atrevió, huyó, no tuvo valor.
Entonces los dioses dijeron:
—¡Ahora tú, Nanahuatzin, que sea ya!
Nanahuatzin hizo fuerte su corazón, cerró los ojos para no tener
miedo y de una vez se arrojó al fuego. Y cuando Tecuciztécatl vio
que Nanahuatzin ya ardía, al momento también se arrojó al fuego.
¡Colaboren!
5
Los dioses se sentaron para ver por dónde habría de salir
Nanahuatzin, el primero que cayó en el fogón, para que hiciera
amanecer. Cuando la aurora inundó con su luz todo, los dioses no
atinaban a decir por dónde venía el Sol. Hasta que se quedaron
mirando hacia el rumbo del color rojo, hacia el oriente.
Aquellos dioses que vieron por dónde salió el Sol fueron
Quetzalcóatl, Ehécatl, Xipe Tótec y Tezcatlipoca Rojo. También los
dioses que se llaman Mimixcoa y las cuatro diosas Tiacapan, Teicu,
Tlacoiehua y Xocoiotl. Cuando el Sol salió no pudo ser observado su
rostro. Su luz y su calor llegaban a todas partes.
Después salió Tecuciztécatl, la Luna, que iba siguiendo al Sol. Del
mismo modo como cayeron, así vinieron a salir, uno siguiendo al otro.
Uno de los dioses tomó un conejo y golpeó el rostro de
Tecuciztécatl, así oscureció su rostro, como hasta ahora se ve.
Como el Sol y la Luna estaban inmóviles los dioses preguntaron:
—¿Cómo habremos de vivir si no se mueve el Sol? ¡Que por
nuestro medio se fortalezca el Sol! —dijeron los dioses.
Entonces Ehécatl quiso dar muerte a los dioses para que el Sol
tuviera movimiento. Pero Xólotl no quería morir, tenía miedo, lloró
mucho hasta que se le hincharon los párpados y huyó ante la muerte.
Xólotl se escondió en la tierra del maíz verde y se convirtió en
doble caña de maíz, la que los campesinos llaman xólotl. Luego se
fue a esconder a un campo donde se convirtió en maguey, el que se
llama maguey de xólotl. Pero como lo descubrieron, se metió en el
agua y se convirtió en ajolote, en axólotl. Fue cuando lo encontraron
y le dieron muerte.
Pero aunque todos los dioses se ofrecieron, el Sol no pudo moverse.
Fue necesario que Ehécatl hiciera andar el viento, sólo así pudo mover
al Sol, y la Luna quedó ahí. Cuando el Sol entró al lugar por donde se
mete, entonces la Luna también se movió. Fue cuando se separaron y
cada uno siguió su camino.
Prepara la clase
Ilustración del
fragmento
Aprender en familia
¿Qué leyendas conocen tus
padres y abuelos sobre los
fenómenos de la naturaleza?
¿Qué enseñanzas te dejan las
leyendas de tu localidad?
Toponimia:
Se le llamó Nicolás
Romero en honor al coronel que
participó militarmente en la Guerra de
Reforma y en la Segunda Intervención
Francesa en México.
Azcapotzaltongo es el nombre más
antiguo de este municipio; proviene
del náhuatl y significa “en el pequeño
hormiguero”.
icolás Romero
60
Lago de Guadalupe.