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Analizas la transición que va de la cosmología medieval
a los problemas de la modernidad
B
loque
III
Las
vías
(que están en la Suma Teológica, parte 1, cuestión 2, artículo 3) son
argumentos que parten siempre de la experiencia humana. Por ejemplo (primera
vía): vemos que en el mundo las cosas se mueven. Y sabemos que todo lo que se
mueve es movido por otro. Si seguimos la cadena al infnito, se daría la situación
paradójica de que no habría un motor primero, y sólo motores “secundarios”, pero
esto –para Aquino– es imposible. Si no hubiera un motor primero, nada se movería.
Así que hay un primer motor, y ése es Dios.
¿Ves la diferencia respecto del argumento de Anselmo? Esta primera vía parte de
la experiencia, del mundo, y no de una defnición, e intenta mostrar la necesidad de
la existencia de Dios al menos en alguno de sus aspectos. Lo mismo hacen el resto
de las vías: la segunda muestra que todo efecto tiene una causa, por lo que debe
haber una causa primera que es Dios.
La tercera argumenta que los seres del mundo son contingentes (es decir, podrían
no ser, podrían no haber existido) y entonces no existiría nada si no hubiera al menos
un ser necesario, que es Dios. La cuarta vía
arguye
que, dado que en el mundo hay
grados o niveles de perfección, debe haber algo sumamente perfecto, que es Dios.
Y la quinta destaca que el mundo está ordenado (incluso aquellas cosas, como el
mar o los fenómenos meteorológicos, que no son inteligentes ni vivos y, por lo tanto,
no se ordenan por sí mismos), y por lo tanto, debe existir un ordenador, que es Dios.
En estos cinco argumentos o pruebas se nota, además, la inFuencia aristotélica,
sobre todo en la primera. De hecho, la primera vía, que muestra a Dios como primer
motor, está tomada tal cual de la argumentación de Aristóteles en el libro XII de su
Metafísica
.
Otro punto en el que el Tomás de Aquino supo aprovechar lo aprendido del flóso o
griego fue en el
problema de los universales
. Esta
controversia
ocupó buena parte
del pensamiento flosófco medieval. Consistía en lo siguiente: como sabes, la
ciencia se ocupa de universales, no de particulares. Es decir, la ciencia trata sobre
el ser humano, no sobre Juan, Pedro, María, etcétera. Ahora, ¿“el ser humano”
existe por sí mismo? Es decir, ¿los universales tienen alguna existencia aparte de
los seres particulares?
Como ya estudiamos, Platón pensaba que sí. Autores como Agustín y Anselmo en
esto eran platónicos; pensaban que las ideas universales existían en la mente de
Dios. Es decir, eran “realistas” respecto de los universales.