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Refexiona sobre lo aprendido
1.- Recuerda que Santo Tomás de Aquino nos enseña que si queremos llegar a
demostrar la existencia de Dios podemos empezar por observar el mundo que
nos rodea y encontrar a Dios como su creador y explicación última. Así, expone
sus famosas “cinco vías” para el conocimiento de Dios.
Las vías (que están en
la Suma Teológica, parte 1, cuestión 2, artículo 3) son argumentos que parten
siempre de la experiencia humana.
La primera vía: vemos que en el mundo las cosas se mueven. Y sabemos que
todo lo que se mueve es movido por otro. Si seguimos la cadena al infnito, se
daría la situación paradójica de que no habría un motor primero, y sólo motores
“secundarios”, pero esto –para Aquino– es imposible. Si no hubiera un motor
primero, nada se movería. Así que hay un primer motor, y ése es Dios.
La segunda vía: muestra que todo efecto tiene una causa, por lo que debe haber
una causa primera que es Dios.
La tercera vía:
argumenta que los seres del mundo son contingentes (es decir,
podrían no ser, podrían no haber existido) y entonces no existiría nada si no
hubiera al menos un ser necesario, que es Dios.
La cuarta vía: dado que en el mundo hay grados o niveles de perfección,
argumenta que debe haber algo sumamente perfecto, que es Dios.
La quinta vía: destaca que el mundo está ordenado (incluso aquellas cosas,
como el mar o los fenómenos meteorológicos, que no son inteligentes ni vivos
y, por lo tanto, no se ordenan por sí mismos) así que debe de existir un gran
ordenador, que es Dios.
Actividad 13.
¿Qué sentiste al pensar que eras realmente pequeño? ¿cómo sería ser una hormiga
y vivir entre hormigas?
Actividad 14.
¿Cuáles fueron los elementos más mencionados en la encuesta? ¿Salió mucho la
palabra “querer”? ¿Qué otras palabras se mencionaron frecuentemente?
Actividad 15.
Observemos que en todos estos casos un grupo negó a otro la calidad de humanidad.
Actividad 16.
Según Marx, en el capitalismo la empresa “extrae”, literalmente, la riqueza de los
trabajadores, de modo que mientras más trabajan éstos, más riqueza crean para
los capitalistas, pero más se empobrecen ellos. Marx pensaba que la
sociedad
industrial
estaba defnida por este conFicto: lo que benefciaba a los capitalistas,
los dueños de las fábricas y los medios de producción en general, perjudicaba
necesariamente a los trabajadores.
Apéndice