Practica esta lección:
Ir al examen
162
Libro para el maestro
122
SECUENCIA 5
Dedicatoria
A todos los niños en cuyas manos dejamos el futuro
L
o
w
r
y
,
L
o
i
s
.
El Dador
. México:
CONACULTA
/ Everest mexicana, 1993, p. 4.
Epígrafe
Cuando emprendas tu viaje a Ítaca pide que el camino sea largo…
Konstantin Cavafis
Sólo algunos llegan a nada, porque el trayecto es largo.
Antonio Porchia
¿Y qué más haría sino seguir y no parar y seguir?
Fernando Pessoa
Villoro, Juan.
El testigo
. México: Anagrama, 2004, p. 11.
Y tú qué dices…
•
Escribe dos semejanzas y dos diferencias de estos textos con el prólogo y la intro-
ducción que leíste anteriormente:
Semejanzas
Diferencias
1.
2.
6.
Comenten y comparen sus respuestas con el grupo.
Los textos introduc-
torios son: prólogo,
prefacio, introduc-
ción, presentación
y advertencia, entre
otros.
SDE/ Contraste entre el uso de la
primera, segunda y tercera persona,
para crear diferentes grados de
compromiso con lo que se dice o
escribe
En la escritura de textos introductorios
el autor emplea diferentes personas
gramaticales para comunicar la
información que presenta. Cuando
quiere involucrarse personalmente y
asumir como suya la información que
está presentando, escribe en primera
persona. Usa la segunda persona
cuando el encargado de realizar la
acción es el lector; de esta manera
se logra involucrar directamente en
el texto mismo. En cambio, cuando el
autor quiere separar su postura
personal, cuando menciona
información que alguien más dijo,
o cuando comenta datos de la vida
de algún personaje, usa la tercera
persona.
1.
Escriba en el pizarrón las siguientes
frases extraídas del prólogo de
Ética
para Amador
e introducción a
Cuentos
Universales del barroco a la
vanguardia
. Comente con los alumnos
las diferentes personas gramaticales
utilizadas por el autor y las
implicaciones que tienen en el discurso.
•
Pero un libro lo puedes leer
cuando quieras, a ratos perdidos
y sin necesidad de dar ninguna
muestra de respeto: al pasar las
páginas bostezas o te ríes si te
apetece, con toda libertad.
•
A veces, Amador, tengo ganas de
contarte muchas cosas. Me las
aguanto, estáte tranquilo, porque
bastantes rollos debo pegarte ya
en mi oficio de padre como para
añadir otros suplementarios,
disfrazado de filósofo.