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Libro para el Maestro
SECUENCIA 4
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Mi nombre es:
Frida Alanis.
La fecha de hoy:
24 de agosto de 2008.
Una meta personal a la que deseo llegar al finalizar este curso es:
Perfeccionar la forma
en que toco la guitarra, ¡me gusta mucho!
4.
Formulen en su cuaderno dos metas personales, guíense con el siguiente ejemplo:
Mis compañeros de grupo también han pensado una meta para mí, a la que debo llegar
al finalizar el curso, y que es: Entrar al equipo de básquet de la escuela.
(¡Ay! soy muy floja para hacer deporte, pero mis compañeros piensan que soy muy hábil
para el juego. ¡Haré un esfuerzo!).
Tres pasos importantes para lograr esta segunda meta:
1) Solicitar mi ingreso al equipo (debo llevar mis papeles y unas fotos).
2) Levantarme temprano los sábados para el entrenamiento.
3) No faltar a los entrenamientos ni a los partidos calendarizados.
Partitura:
Texto de
una composición
musical correspon-
diente a cada uno de
los instrumentos que
la ejecutan.
Tres pasos importantes para lograr esta primera meta:
1) Ensayar al menos dos días a la semana, de aquí al término del
ciclo escolar.
2) Dedicar al menos una hora a cada ensayo (ver menos
televisión).
3) Conseguir diferentes
partituras
para poder sacar más
canciones en la guitarra.
2
En esta última actividad de la sesión, puede
apoyar el trabajo de los estudiantes
acercándose a los equipos. Ponga énfasis en
las siguientes orientaciones:
Ayude para que definan metas realistas,
tanto las individuales como las de grupo.
Fomente que las metas propicien su
desarrollo físico o sus capacidades
manuales, intelectuales y sociales, a
través de algún deporte, o a través de
ingresar a talleres, clubes de lectura o
escritura, clases de oratoria, trabajo
comunitario, etcétera.
Recuérdeles que se trata de metas no tan
difíciles de alcanzar en el corto plazo.
Usted también trace sus metas individua-
les, y retome alguna de las sugeridas por
su grupo. No olvide trabajar para
cumplirlas, dada la importancia de
acompañarlos en su formación.
Durante el transcurso del ciclo, recuerde y
pregunte a sus estudiantes cómo va su
trabajo para conseguir sus metas. No deje
que olviden el compromiso adquirido.
Durante el ejercicio vaya desplazándose
entre las bancas, para ver más de cerca lo
que sus alumnos escriben en sus cuadernos.
Platique con ellos sobre ideas para
comprometerse en metas que les permitan
encaminarse otras metas de mayor alcance.
Platique con ellos y oriéntelos, sobre todo
cuando detecte metas que pueden ser
peligrosas para ellos. Por ejemplo, una meta
puede ser irse de mojado a los Estados
Unidos. Sin criticar la idea, converse sobre
los riesgos que implica esa meta, de manera
tal que el chico o la chica esté consiente de
ello.
Con todo, le recomendamos ser muy
respetuoso ante los planteamientos de
posibles metas de sus estudiantes.
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